¿Que no sabemos discutir? Que sí y punto. Primero porque lo que yo digo es así y no hay… ¡Cállate cretino! Y por supuesto, diálogo. Hay que hablar. Repito: diá-lo-go o diáloga, también. Señores y señoras, profesores y profesoras y profesoros, hay que hablar, por ejemplo, de que tongo unu hermeguete en la patata. No me queréis entender, es una pena...
Sí, precisamente ahora, cuando los humanos estamos enredados, prisioneros en el individualismo de nuestras cosas; inquietos e incapaces de resolver los problemas creados. Cuando caminamos perdidos por los desiertos del orgullo; y deicidas, fratricidas y ecologicidas vivimos con inconsciencia sin rumbo. Y cuando la pérdida de los auténticos motores imposibilita detener la caída libre y recuperarnos levantando vuelos… Ahora precisamente y no implica novedad, aparece “Dios” (siempre atento) o “la Naturaleza” (dirán otros) para abrir soluciones ofreciendo otras puertas y nuevos horizontes: el inesperado regalo, “especie de coronavirus”. Es verdad que aún cabe la duda de si la inteligencia disponible permitirá aprovecharlo, o lo hará como siempre en parte. ¡Incluso esto sería suficiente!
1. - Steph: Hemos hablado de la Esperanza, esa actitud o perspectiva desde la que los creyentes pensamos y vivimos el futuro: que la vida no acaba con la muerte y que esperamos el encuentro con Dios que da sentido y lleva la vida terrena a su plenitud… Recordamos que el término de la historia será la manifestación de Cristo y consistirá en llevar estos cielos y tierra, este mundo, a su plenitud (la parusía); y que esa nueva creación implicará una nueva humanidad (la resurrección de los muertos)…Hoy quiero preguntarte cómo dice la fe que será la vida de esa “nueva humanidad” en los “cielos y tierra nuevos”, sobre la vida eterna.
1 - Steph: En nuestro primer café comenzamos a recordar lo que dice la fe cristiana respecto a los acontecimientos últimos y definitivos del mundo y la vida humana. Eso condiciona nuestra actividad educativa… Decíamos que la esperanza es la actitud del creyente ante el futuro; la perspectiva desde la que nos situamos; porque la vida no acaba con la muerte. Y que esperamos el encuentro con Alguien trascendente (el Señor) que da sentido y lleva al mundo y a la vida terrena a su plenitud… Hablemos hoy, en nuestro segundo café, sobre este mundo después. José Antonio, ¿qué entendemos por PASCUA DE LA CREACIÓN, la PARUSÍA (el mundo después)?.
Dos cafés muy calientes y alboroto en el bar; también sirven un “derby”. Al otro lado del ventanal, gris implacable y frío, simplemente otoño…