Cuando uno llega a una entidad o empresa como usuario o cliente se encuentra a unos trabajadores cuyas vidas pueden ser o no interesantes, pero las cuales desconoce. Por esa razón y porque el departamento de deporte escolar y valores de Escuelas Católicas de Madrid (ECM) es cercano y desea acompañar, conociendo y abriéndose, a todos los participantes de los Juegos Deportivos vamos a comenzar esta serie de entrevistas personales que nos acercarán a las personas y no a los trabajadores que gestionan dicho evento.
El último de ellos en llegar será el primero, siguiendo el Evangelio de san Mateo, en abrir y abrirse en esta serie de cuatro entrevistas personales. Este empleado es Eduardo Redondo, que hasta hace unos meses fue coordinador de deportes de Asunción Cuestablanca.
P. Eduardo, ¿cómo entraste en contacto con el deporte escolar promovido desde ECM, eras alumno de algún centro afiliado?
R. Mi primera experiencia dentro de los Juegos Deportivos de ECM fue como alumno y jugador del colegio Nuestra Señora de la Consolación. Empecé a jugar a fútbol sala en la categoría prebenjamín y pasé por todas hasta juvenil. Disputar esta competición me permitió participar en los Juegos EMDE. Mi primera edición se disputó en Valladolid y las siguientes en Torremolinos. En el año 2010, cuando tenía edad de categoría cadete, llegamos a la final y eso me abrió las puertas de la FISEC. Un verano más tarde disputé dicho campeonato en Lisboa. De aquella época guardo amigos para toda la vida, colecciono un sinfín de buenos momentos y anécdotas y, sobre todo, un largo aprendizaje en valores para toda vida.
Cuando dejé de jugar, por diversas lesiones, decidí saltar a los banquillos donde he pasado los diez últimos años en el colegio Asunción Cuestablanca. Allí llegué a ser coordinador de fútbol sala primero y de deportes general después.
El colegio Ntra. Sra. De la Consolación campeón de futsal infantil en los juegos EMDE disputados en Torremolinos
P. Como veo, tu trayectoria es dilatada y en todos los ámbitos posibles, local, nacional e internacional, así como desde todos los ángulos, jugador, delegado y coordinador, pero mi duda es la siguiente: ¿Qué viste o viviste durante tu etapa de jugador y alumno que te hiciera decantarte por esta competición cuando asumiste el cargo de coordinador en Asunción Cuestablanca?
R. Lo primero que percibí como jugador fue una organización exquisita tanto a nivel deportivo, como a nivel personal. Además, la idea de organizar “una competición diferente” en la que los resultados y los títulos son importantes, pero los valores que se transmiten cada fin de semana lo son más, fue lo que me decidió a proponer a la dirección del colegio un cambio. Allí participaban en los Juegos Municipales del Ayuntamiento en el distrito de Hortaleza y propuse un cambio a la liga de ECM. La aventura empezó con dos equipos y la temporada pasada llegamos a inscribir 17 entre todos los deportes.
Lisboa acogió en 2011 los Juegos FISEC en los que participó Eduardo representado a España y a su colegio
P. Además de tu vida deportiva y laboral en el entorno deportivo ECM nos interesa saber más de ti, como, por ejemplo: ¿Qué estudiaste, qué te atrajo para recalar en este departamento y qué es lo que crees que puedes aportar a esta casa?
R. Estudié periodismo en la Universidad Rey Juan Carlos. Mi idea era seguir ligado al mundo del deporte y hacer de mi pasión mi profesión. Esto es algo que conseguí durante algunos años en los que trabajé en el diario MARCA. Sin embargo, la vida me llevó hasta el periodismo de provincia en El Adelantado de Segovia y en Norte de Castilla. Antes de todo esto también trabajé en TVE y LaSexta.
Siempre he intentado compaginar dos trabajos: uno como periodista y otro ligado al futsal como entrenador o como coordinador. De esta nueva oportunidad me atrajo, en primer lugar, esta idea de poder unir mis dos trabajos, aunque de una manera diferente. Por otra parte, al departamento creo que puedo aportar mi experiencia desde el otro lado e intentar mejorar la relación con los centros, además de toda mi experiencia en el mundo del periodismo.
Equipo de categoría Cadete del colegio Asunción Cuestablanca en la pasada edición de los Juegos EMDE
P. Está claro que el hecho de ser cocinero antes que fraile es un plus para empatizar con tus excolegas de profesión. ¿Pero ahora que estás apartado de la gestión de los equipos deportivos sigues vinculado al deporte, practicas alguno? Cuéntanos.
R. Las rodillas me impiden hacer muchos deportes, entre ellos jugar al futsal, por eso decidí hace ya unos años practicar otras disciplinas. Desde pequeño he montado a caballo y la relación con los animales es algo que llevo dentro. Desde hace tres años estoy federado en Doma Vaquera, un deporte poco conocido en Madrid, pero que es la estrella en Andalucía. Esta disciplina consiste en llevar a una pista el trabajo que los vaqueros realizan en el campo con el ganado. Los ejercicios son parecidos a los de la Doma Clásica pero el ‘pellizco’ vaquero que dicen en Sevilla es lo que me atrajo de esta disciplina.
En el año 2007, Eduardo recogió el trofeo de tercer clasificado en futsal
P. Es curioso y sorprendente para muchos de nosotros conocer a un jinete de doma vaquera, porque esa disciplina suele practicarse más en otras zonas de España que en Madrid, Andalucía por ejemplo. ¿Cómo llegaste a aficionarte a ella, son tus orígenes del sur de España?
R. Para nada… No tengo nada que ver con Andalucía. De hecho, soy segoviano y toda mi familia también. Sin embargo, allí siempre hemos tenido ganado y caballos para trabajar. Los fines de semana cuando era niño consistían en jugar el partido de ECM con la camiseta de Consolación y montar a caballo en el pueblo o ir a dar de comer a los animales.
P. ¿Cuál ha sido tu mayor triunfo en el marco de esa disciplina? ¿Qué les aconsejarías a los niños, y más a los padres, respecto a lo que debe de ser el deporte aficionado en edad escolar en el marco de cualquier modalidad, practicada dentro o fuera del colegio?
R. Este año ha sido mi primer año en la competición y no ha sido fácil. Hay que tener en cuenta que en esta disciplina intervienes tú junto con un animal de más de 500 kilos. A nivel territorial he cosechado dos terceros y un cuarto puesto. Esto me ha llevado a participar en la Final de la Comunidad de Madrid en la que quedé sexto clasificado. Además, en el mes de noviembre participaré en la Copa del Rey, una de las competiciones más importantes del año y en la que se dan cita jinetes de todo el país.
Como en cualquier deporte, hay categorías en función de la edad. Es increíble ver como niños de 11, 12 o 13 años se mueven en las pistas. Sin embargo, a ellos también les afecta el hecho de tener que mover a un animal muy pesado. La frustración es algo que se trabaja mucho en el deporte y más en esta disciplina. En ocho minutos tienes que enseñar a los jueces lo que llevas entrenando meses y las cosas no siempre salen bien. La superación personal, el esfuerzo diario o la perseverancia son valores intrínsecos a la práctica deportiva que, en el caso de la equitación, se vuelven fundamentales. El deporte en edad escolar tendría que ser una herramienta de aprendizaje y nunca un pozo de frustración.
Competición de Doma Vaquera en Madrid
P. Para terminar, acaba de celebrarse el derbi de fútbol y tú eres madrileño y exjugador de futsal, seguro, por tanto, que sigues a uno de los equipos de la capital. Dinos cuál es el club de tus amores y desde tu perspectiva de seguidor de este cómo entiendes la situación dantesca vivida en dicho partido respecto a la actitud de algunos seguidores rojiblancos.
R. Se podría decir que mi equipo es el Real Madrid. Mi colegio, la Consolación, se encuentra a pocos metros del estadio y eso me ha permitido ver a los jugadores cuando entraban y salían, asistir a partidos, a presentaciones, a entrenamientos… Sin embargo, durante mi etapa en MARCA me tocó cubrir la información del club y esto me alejó bastante del equipo. Hoy en día sólo veo los partidos más importantes y prefiero asistir a cualquier partido entre canteras.
Respecto a lo ocurrido en el Metropolitano el pasado domingo, la situación me causa gran rechazo por la actuación de los futbolistas. No se dan cuenta de que son el espejo en el que se miran los niños y las aptitudes de Courtois, Koke, Giménez o el Cholo no son ejemplo de los valores que deberían trasmitir. En cuanto a lo ocurrido en la grada, no me gustaría perder demasiado tiempo con ellos, cualquier persona que utiliza el deporte para mostrar actitudes violentas debería estar fuera de todos los recintos deportivos.
Felipe Marrón
Departamento de Deporte Escolar y Valores